Últimamente me siento algo desmotivado, en mi lado profesional y también en la parte de mis “hobbies”, de forma más específica en los pasatiempos productivos.
Me cuesta mucho comenzar a escribir, cuando consigo vencer ese paso me asalta el gran problema de las distracciones. Creo que necesito desarrollar un método que me permita aislarme del resto del mundo mientras dedico un tiempo a la escritura. Es cierto que leyendo no me ocurre, o jugando a videojuegos, o cuando estoy realizando alguna tarea en el trabajo.
Puedo también utilizar la técnica pomodoro para la escritura, a ver qué tal me adapto. Aunque necesito orientar el descanso de esa técnica a otra tarea que no sea un chequeo de notificaciones o tiempo de pantalla. Puede ser dar un pequeño paseo, hacer alguna tarea de casa que esté pendiente.
Creo que voy a comenzar a escribir estas entradas con este método.
¿Es posible vivir la vida sin tener que estar esclavizado a un teléfono móvil durante todo el día?
¿Es la hiperconexión lo que está matando mi imaginación? Me gustaría desinstalar y eliminar muchas de las aplicaciones que tengo en mi teléfono móvil. Luego me doy cuenta de que es una herramienta de comunicación además de una cámara de fotos y de video, además de una herramienta de entretenimiento, además de un gran somnífero para no escuchar tus propios pensamientos. Lidiar con la culpa de no querer estar conectado, de no querer ser molestado. Hiperconexión en casa e hiperconexión en el trabajo.
Hace tiempo ya, eliminé las notificaciones del reloj “inteligente”, que uso para correr.
El siguiente paso que pretendo realizar:
- Darle un horario al periodo que el teléfono móvil personal puede tener conexión (por ejemplo, probaré con 30 minutos por la tarde-noche) y dejarlo en un punto fijo en la casa, al estilo de los teléfonos fijos que teníamos antes.
No tengo ni idea de si a alguien esto le resultará interesante, o si llegará hasta estas líneas… Pero si es así, enhorabuena persona valiente. Como regalo te dejo una recomendación doble y única a la vez, se trata de la BSO del videojuego The Red String Club, puedes escucharla en el bandcamp de su creadora Paula (aka fingerspit)
Una delicia de melodías y canciones que he disfrutado desde que jugué a este maravilloso videojuego, una aventura narrativa sobre el destino y la felicidad. Ciberpunk, alfarería y cócteles… Vamos una fantasía que merece la pena jugar. Desarrollado por el estudio valenciano Deconstructeam.
Gracias por leer.